El presidente Nayib Bukele cuestionó al diario estadounidense Wall Street Journal por aseverar que el país ha reducido los homicidios a costa de aumentar la población carcelaria.
Ante ese argumento, el mandatario respondió que el ataque a la delincuencia de manera efectiva siempre implicará que los criminales serán sacados de las calles para que paguen por sus delitos, lo que constituye una obviedad, a criterio del presidente.
«¿No sería obvio que si teníamos la tasa de homicidios más alta del mundo, fue precisamente porque teníamos muchos delincuentes en las calles, que se suponía que estaban en la cárcel en primer lugar?», respondió el mandatario ante los argumentos del periódico estadounidense.
«Parece que la lógica básica ha abandonado por completo la civilización occidental», agregó el jefe de Estado al poner en tela de juicio el sentido común de sectores de la comunidad internacional que están abogando por un hablandamiento de las medidas contra las pandillas.
Contrario a esa postura, más del 90% de la población salvadoreña se siente satisfecha con el régimen de excepción y el encarcelamiento de miles de pandilleros que controlaban las calles a través de asesinatos y otras acciones de terror, sometían a colonias y territorios en general donde tenían controlada a la ciudadanía y cobraban abiertamente millones de dólares en renta a comerciantes, empresarios, profesionales, trabajadores y vendedores en pequeño.