Con banderas azul y blanco, camisas del escudo nacional, el torogoz o con la imagen del presidente Nayib Bukele, miles de salvadoreños celebran una verdadera independencia en un ambiente de seguridad, paz y armonía.
Los salvadoreños que han ocudido a la celebración de los 201 años de Independencia su alegría ante el momento histórico que vive el país: mejora sustancial de la seguridad pública.
Hasta hace unos años, El Salvador era considerado como el país más violento del mundo en donde 40 asesinatos era cosa de todos los días, mientras los gobiernos anteriores pactaban la sangre del pueblo a cambio de votos.
En los últimos meses, de manera particular, la población se siente más segura con el encarcelamiento de casi 52 mil pandilleros y destacan una voluntad nunca vista en gestiones anteriores para combatir a las pandillas.
«Gracias al presidente Nayib Bukele, gracias a las personas que dan la vida por nuestro pueblo, me siento feliz de poder estar aquí. Finalmente, como salvadoreño, me siento libre», dijo Elmer Caballero, una opinión compartida por el resto de los asistentes.