Durante la ejecución de obras viales en un sector del norte de Polonia, conocido como Luzino, fueron encontrados numerosos huesos de humanos que datan posiblemente del siglo XIX
De acuerdo con las autoridades que llevaron a cabo la inspección, se descubrió que algunos de los 450 cadáveres encontrados habían sido decapitados y tenían las cabezas cortadas colocadas entre las piernas. Se cree que los cuerpos fueron sometidos a rituales de protección contra la «maldición de los vampiros», una práctica habitual en esa zona durante el siglo antepasado.
Además de la decapitación de los cadáveres y la colocación de las cabezas entre las piernas, estos rituales incluyen la colocación de una moneda en la boca. Una de las monedas encontradas en la fosa común de los presuntos vampiros databa del año 1846.
«Curiosamente, hemos encontrado costumbres de enterramiento antivampíricas, destinadas a aislar al difunto del mundo de los vivos», comentó el arqueólogo Maciej Stromski. Agregó el experto que aproximadamente un 30% de los cadáveres tenían ladrillos colocados junto a sus cabezas, brazos y piernas.
De acuerdo con el experto polaco, se tenía la supertición que si un miembro de la familia del difunto moría poco después del funeral, podía ser un vampiro. «Por ello, ya después del entierro, se cavaba la tumba y se le cortaba la cabeza al difunto, que se colocaba en las piernas», explica Stromski.