El partido enfrentó su peor derrota electoral en febrero de 2024
ARENA, el partido tricolor, ejerció una fuerte presión contra el candidato que designaron para las elecciones presidenciales de 2024, Joel Sánchez. Lo extorsionaron, lo enfrentaron contra los liderazgos departamentales y le hicieron una guerra psicológica.
Durante una entrevista con un medio digital, Sánchez expresó que el militante arenero, Selim Alabi, continuamente lo amenazaba con expulsarlo; incluso, desde los primeros días desde que se incorporó al partido. Alabi es la mano derecha de Carlos García Saade, dirigente de ARENA y el “cerebro” detrás de sus argucias, de acuerdo con lo que dijo el ex candidato (de profesión empresario).
“Pero como no hacía caso (…) Él (Alabi) decía, ‘este es indisciplinado… Hay que sacarlo’ del partido”, recordó Sánchez. Hasta cuando tuvo el aval para su candidatura desde el Tribunal Supremo Electoral, “me dieron solo estas dos opciones: o renunciás, o te expulsamos”, afirmó el ex candidato. Esto se suma a la extorsión a la que fue sometido por parte de líderes departamentales, quienes le exigían dinero al empresario migrante para sus propias actividades proselitistas.
En febrero de 2024, ARENA sufrió su peor derrota electoral. No logró alcanzar ni siquiera a su némesis histórica, la ex guerrilla. Desde entonces, García Saade distribuye culpas entre militantes, autoridades de Gobierno y en los candidatos mismos.