La selección de Gales cayó 0-3 ante Inglaterra y se quedó sin sueño mundialista, por lo que su máxima figura, Gareth Bale, se marchó eliminado, lesionado y agrediendo a un cámara.
Bale fue sustituido al descanso y posteriormente al juego el entrenador de los dragones, Robert Page, informó de que se trata de un problema en los isquiotibiales.
El extremo dejó salir su frustración después del pitazo final propinando dos manotazos a uno de los camarógrafos que lo estaba grabando cuando se dirigía a los camerinos.
Bale compareció en la conferencia posterior al juego y no se refirió al incidente, únicamente al aspecto deportivo.
La primera consulta fue sobre si seguirá en la selección. «Seguiré mientras pueda y me quieran (…) no hemos cumplido nuestras expectativas, pero sacamos mucha experiencia de esto», fue su respuesta.
El ariete agregó que espera poder iniciar el camino eliminatorio a la próxima Eurocopa que arranca en marzo de 2023 y finalizará en marzo 2024.