Perú decretó estado de emergencia por 30 días por el aumento de la violencia en todo el país, que ha dejado a la fecha un saldo de siete muertos y decenas de heridos, entre ellos miembros de la policía local.
Con el decreto de emergencia, quedan suprimidos los derechos de reunión, inviolabilidad de domicilio, libertad de tránsito, y libertad de seguridad personal, anunció el ministro de Defensa, Alberto Atárola.
Atárola dijo que la medida es por el incremento de “actos vandálicos y violentos, a la toma de carreteras y caminos que ciertamente ya son actos que se están estabilizando y siendo controlados por la Policía Nacional y por las Fuerzas Armadas”, aseguró.
Con el estado de emergencia, los militares toman el control de la seguridad pública y regularán todas las disposiciones contenidas en el decreto de emergencia.