La montañista Alfa Karina Arrué ha escrito su nombre en la historia del mundo como la primera salvadoreña en conquistar los más de 8,800 metros del Monte Everest y se ha sumado a la lista de deportistas salvadoreños que han puesto en la cima del mundo a El Salvador.
Arrué contó con el apoyo del Instituto Nacional de los Deportes de El Salvador (INDES) para su ascenso a la montaña más alta de la superficie del planeta.
La salvadoreña ya lo había intentado en una ocasión y llegó hasta el Collado Sur, pero continuó soñando en grande y finalmente pudo conquistar la montaña en la cordillera del Himalaya, en Nepal.
Karina se une a la lista de salvadoreños que han erigido su nombre en la cima del deporte mundial, comenzando por Jorge “Mágico” González y sus regates con el Cádiz en la liga de España que no serán olvidados por generaciones.
Del fútbol al tiro con arco, un territorio que dominó por años Jorge Jiménez, que acumuló decenas de premios individuales y participaciones en copas del mundo, así como Roberto Hernández y su oro en los Juegos Panamericanos de Lima en 2019.
En los Panamericanos de ese año el himno de El Salvador sonó en más de una ocasión en la disciplina de fisicoculturismo con Paulina Zamora y su presea dorada o el podio de Brayan Pérez y las esperanzas de verle competir en los Juegos Olímpicos de Tokio.
En la élite del parapowerlifting se encuentra Herbert Aceituno y su oro en los Juegos Parapanamericanos Lima 2019 y su participación en los paralímpicos de Río de Janeiro en 2016.
El deporte blanco salvadoreño lo representa Marcelo Arévalo y su presencia en cuatro Grand Slams que lo llevaron a imponerse en el top 100 de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP).