Migrantes de diferentes nacionalidades escenificaron la crucifixión de Cristo y exigieron justicia por la tragedia ocurrida en una estación migratoria del Gobierno ubicada en Ciudad Juárez, estado de Chihuahua, México.
Un centenar de personas caminaron en caravana, en muchos de ellos se quitaron los zapatos para andar descalzos y llegar a las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM), lugar donde ocurrió el incendio donde murieron 38 migrantes.
“El hecho de quitarnos los zapatos es para que la comunidad se ponga en nuestros zapatos y entiendan que ellos no están aquí por gusto”, añadió Carlos Mayorga, organizador del acto.
Los activistas pidieron a las autoridades federales destruir el edificio gubernamental y se crear un memorial, por los hechos ocurridos el pasado lunes por la noche.