El Ministerio de Medio Ambiente ha instalado «cámaras trampa» en el Área Natural Protegida Los Farallones, ubicada en el municipio de San Julián, Sonsonate, para tener información científica y confirmada de las especies que habitan en dicho lugar.
Con estas cámaras trampas, los biólogos de la institución esperan crear un inventario de especies que no han sido identificadas en ese hábitat de la zona protegida.
El objetivo es además, darle seguimiento a estas especies y protegerlas de depredadores que puedan poner en peligro su ecosistema.
Con este tipo de tecnología del programa de conservación de la vida silvestre, el Ministerio de Medio Ambiente ha captado especies que creían que ya no habitaban en algunos puntos del país, como un par de pumas.