A un año del régimen de excepción, el ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, valoró que su implementación no fue una decisión antojadiza, sino la activación de un protocolo ante la amenaza que significaban las pandillas para los salvadoreños
“Venimos de una cultura de muerte donde, si no se pagaba renta o mandaba a los hijos para que fueran parte de las pandillas o se enviaba a las hijas para tener relaciones sexuales, mataban, y eso no lo entiende mucha comunidad internacional y algunas organizaciones”, indicó Villatoro.
El funcionario resaltó que el régimen de excepción ha sido la esperanza para todo un país. “Es el Estado recuperando el territorio, es el Estado recuperando la tutela y la vigilancia de nuestra población. ¿Eso a qué te lleva? a más de un 96% de aprobación popular”, añadió.
Villatoro indicó que el estado de excepción ha logrado la captura de 66,417 pandilleros, además del decomiso de dos mil 547 armas de fuego, tres mil 292 vehículos, 15,878 celulares y más de tres millones de dólares en efectivo.
El ministro señaló que, gracias al régimen de excepción, han capturado a 10 sillas de las 15 que lideraban a la MS-13. Mientras que el «pilar nacional» de la 18 ya ha sido desarticulado, además hay más de 1100 cabecillas que ya están tras las rejas.
Agregó que mantienen una comunicación con los países vecinos para coordinar y traer a los pandilleros que han huido, para que se sometan a la justicia salvadoreña.
