La selección de Francia y vigente campeona del mundo, ejerce presión sobre la UEFA y FIFA. Los galos exigen enérgicamente una exclusión de Rusia del próximo mundial tras la invasión a Ucrania.
A la presión de Francia se une la de Polonia, que se niega a jugar el partido de la eliminatoria al mundial rumbo a Qatar 2022. Su capitán y estrella, el delantero del Bayer Munich, Robert Lewandowski, criticó fuertemente el conflicto.
Lewandowski ha explicado su posición ante lo que sucede actualmente en Europa, señalando que utilizará un brazalete con la bandera de ucrania en símbolo de protesta y solidaridad hasta que el conflicto finalice, del mismo modo anunció que, como selección, no están dispuestos a viajar a Moscú.
El mundo del fútbol ha sido solidario con los deportistas: ayer, en el partido del Manchester City y Everton, pidieron un alto a la guerra. La acción también se vio replicada en el encuentro de Barcelona y Nápoles.
A las acciones de protestas se le unen la del Manchester United, rompiendo contratos importantes con patrocinadores rusos.
UEFA, de momento, ha decidido castigar a la Federación Rusa quitándoles la final de la UEFA Champions League, trasladándola a Paris, como nueva sede
