Un marroquí de 25 años, es señalado por las autoridades españolas de ejecutar dos ataques armados a iglesias de Algeciras, que dejaron a un sacristán muerto y un sacerdote herido.
El sujeto tenía orden de expulsión del país, debido a la situación migratoria, según dieron a conocer las autoridades.
Tras su detención, la vivienda donde residía fue allanada, esto como parte de la investigación sobre terrorismo que se ha iniciado.