El presidente ruso, Vladimir Putin, descartó que el avión en que viajaba el dueño del grupo paramilitar PMC Wagner, Yevgeny Prigozhin, haya sido derribado por un misil y afirmó que la caída de la aeronave fue producto de explosiones ocurridas al interior de la misma.
«En los cuerpos de las víctimas del desastre aéreo se encontraron fragmentos de granadas de mano. No hubo ningún impacto externo en el avión», manifestó el mandatario ruso este jueves, tras informar que el jefe del comité investigadores del accidente le había notificado de las conclusiones sobre el incidente.
Putin lamentó que en la investigación no se hayan llevado a cabo pruebas toxicológicas para descartar el consumo de alcohol o cocaína durante el vuelo por parte de los ocupantes, teniendo en cuenta que durante los allanamientos a la empresa de Prigozhin, llevados a cabo luego de su rebelión contra el Kremlin, en junio, fueron encontrados 5 kilogramos de cocaína en una de sus oficinas.
«Sabemos que después de los famosos acontecimientos ocurridos en la empresa (PMC Wagner ) de San Petersburgo, el FSB encontró no sólo 10.000 millones en efectivo, sino también cinco kilogramos de cocaína», manifestó el presidente.
El 23 de agosto pasado, Prigozhin viajaba junto con su jefe de operaciones Dmitry Utkin y otros mandos de PMC Wagner, y la nave se vino a tierra tras una explosión en el aire que desprendió el ala izquierda de la nave, en la zona de Tver.