El presidente de la Asamblea Legislativa, Ernesto Castro, reiteró que, tras la aprobación de las reformas a la Ley de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, está prohibido conducir bajo los efectos del alcohol o cualquier droga y, cualquier persona que infrinja la ley, será detenido por conducción peligrosa y enfrentar de dos a cinco años de cárcel.
“A partir de hoy, se castigará con mayor severidad la conducción peligrosa. Ya basta de tanto dolor causado por la imprudencia de algunos. Vigente a partir de esta noche. Están avisados”, reiteró Castro.
Las reformas también incluyen multas más severas para combatir la irresponsabilidad ante el volante, como la distracción y el exceso de velocidad, que son de las primeras causas de accidentabilidad en el país.