En cinco años el Presidente Nayib Bukele consiguió lo que muchos creyeron imposible: devolver a los salvadoreños la seguridad de caminar tranquilamente por las calles del país.
El Salvador fue etiquetado como el país más peligroso del mundo con la capital de los homicidios. Ahora pasó a ser una de las ciudades más atractivas para hacer turismo.
Desde 2021, San Salvador salió de la lista de las 50 ciudades más violentas del mundo, de acuerdo con los rankings elaborados por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal de México.
Luego del lanzamiento del Plan Control Territorial (PCT), el 20 de junio de 2019, el país fue reduciendo el número de homicidios y otros delitos de alto impacto.
El principal logro de la estrategia de seguridad del Gobierno es la reducción de los homicidios. Desde la llegada del Presidente Bukele se contabiliza un promedio de 600 días sin asesinatos.
Contrario a los tres quinquenios anteriores donde hubo solo dos días sin muertes violentas.
Al cierre del año pasado, el Presidente Bukele declaró el año como el más seguro en la historia del país al registrar la tasa de homicidios más baja: 2.4 por cada 100,000 habitantes. El promedio diario de asesinatos fue 0.4.
“El Salvador cierra el año más seguro en toda su historia y se convierte en el país con la tasa de homicidios más baja de toda Latinoamérica”, destacó el Mandatario.
Durante el discurso de agradecimiento por su reelección, en febrero pasado, el Presidente Bukele expresó: “Literalmente pasamos de ser el país más inseguro del mundo a ser el más seguro del hemisferio occidental”.
En un post, del 12 de mayo pasado, el Presidente Bukele aseguró que tras su llegada al Gobierno ha habido una reducción del 95 % en el número de asesinatos.
“Desde la aprobación del régimen de excepción ha habido una caída del 86 %, y desde que entramos al gobierno en 2019 la caída ha llegado al 95 %. Proyectamos una caída del 97 % para 2024”, indicó.
Además, gracias al régimen de excepción el Gobierno ha logrado sacar de las calles a más de 80,000 pandilleros que por décadas causaron zozobra en la población.
El sistema carcelario del país también sufrió una transformación donde los criminales pagan sus penas bajo una rigurosa vigilancia, dejando atrás aquellos episodios donde los pandilleros eran los que mandaban.
Un referente en la región
Tanto es el éxito de los planes de seguridad del Presidente Bukele que muchos países han manifestado su interés por conocer y replicar algunas de las medidas que se han implementado en El Salvador.
Las acciones emprendidas por el mandatario han sido muchas para alcanzar los niveles de seguridad de los que goza ahora la población; analistas y expertos en seguridad coinciden en que el ingrediente principal del éxito en la seguridad ciudadana es la voluntad política del jefe de Estado.