La NASA ha iniciado con trabajos para extraer materiales de la luna que permitan que esta sea habitable por seres humanos.
A partir del 2024, se iniciarán las pruebas para embotellar el oxígeno en tanques de gas comprimido o licuarlo, y almacenarlo.
Una megatuberia sería instalada en el polo sur de la luna y servirá para que investigadores puedan explorar las arquitecturas del sistema.
El objetivo final sería crear un oleoducto lunar de cinco kilómetros para conseguir operar con una energía mínima durante la vida útil de la tubería.