El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, negó que su ciudad esté sitiada por militares rusos, como difundieron inicialmente varios medios.
Al contrario, Klitschko ha asegurado que la capital de Ucrania está resistiendo los bombardeos rusos y que de momento no hay presencia militar rusa en la ciudad, pero ha confirmado al menos nueve civiles «muertos o desaparecidos» durante los ataques aéreos.
El alcalde, ha declarado, que los hospitales aún funcionan «en estado de guerra», y ha pedido donaciones de sangre para futuras emergencias, pero ha garantizado que «todas las instalaciones críticas siguen funcionando».
En cuanto al sustento de los civiles tras 4 días de guerra, Klitschko manifestó que están entregando como gobierno y en compañía militar a los campamentos o en los compartimientos identificados, pero asegura que algunas tiendas continúan abiertas y venden comida en horario de 8:00 am a 2:00 pm. Ante la imposición del toque de queda a las 5:00 pm.