El embajador y observador permanente de la Organización Internacional de la Juventud ante las Naciones Unidas, Daniel del Valle, constató de primera mano el funcionamiento del Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), una cárcel de máxima seguridad en El Salvador.
El español en su experiencia narra que esta mega cárcel es posiblemente la más destacada en los tiempos actuales.
“Se ha convertido en un ejemplo en un modo que justamente quieren imitar muchos países. Hace poco venía el secretario de Estado de los Estados Unidos, Marcos Rubio, y precisamente, el presidente Bukele de El Salvador le ofrecía que cualquier reo de alta peligrosidad que hubiera necesitar algún tipo de confinamiento un poco más preciso se le abrían las puertas para poder también entrar aquí”, dijo.
Del Valle aseguró que si alguien pregunta por El Salvador en cualquier parte del mundo la respuesta ha cambiado, ya que antes era sinónimo de miedo por la violencia que existía en las calles.
“Sus calles contaban historias de balas, extorsiones y familias totalmente destrozadas por las pandillas, hoy el relato es otro, hoy el país ha dado un giro que pocos imaginaron posible y aquí en el corazón del cambio se encuentra este lugar el CECOT”, indicó.
Al finalizar el recorrido para conocer historias y el funcionamiento del CECOT el español insistió en que este es el ejemplo que deberían de seguir los países de la región cuando se vive una situación que le quita la paz a los ciudadanos.