El candidato presidencial autodenominado libertario, Javier Milei, ha prometido bajar los gastos del presupuesto de Argentina en unos 15 puntos del PIB, con el objetivo de equilibrar las finanza es ese país, afectado por una inflación interanual que alcanza el 142,7% y del 8,3% en octubre recién pasado. Pero ¿cómo piensa lograr una de las tareas más complejas e impopulares para cualquier gobierno?.
De entrada, la palabra clave es «eliminar». El aspirante propone eliminar el impuesto a las ganancias reinvertidas, eliminar las transferencias discrecionales , que son 5 puntos del PIB, eliminar la Obras Pública y establecer un mecanismo de iniciativa privada a la chilena, donde quienes quieran usar esta obra deberán pagar a las empresas, y que son cerca de 3 puntos del Producto Interno Bruto. «Acabo de mostrar cómo se pueden bajar 13 puntos del PBI sin costo social», dijo el candidato que hoy disputa la presidencia con el oficialista Sergio Massa.
Terminar el gasto excesivo de las empresas públicas, que podría implicar la privatización, así como eliminar las pensiones de privilegios sumarían otros dos puntos del PIB, que permitirán lograr un superávit, debido a que el déficit actual de gasto es de 5 puntos, según dijo Milei.
Otras de las propuestas de Milei para bajar las altas tasas de inflación en el país sudamericano es la dolarización de la economía. Como mejor ejemplo se refirió a economías como la de Ecuador, Panamá y El Salvador, donde la tasa de inflación se mantiene más estable que en aquellos países donde el dólar no es la moneda de curso legal.