En rechazo y como símbolo de resistencia al racismo, la selección brasileña de futbol vestirá de negro, por primera vez en su historia, durante el encuentro contra Guinea a celebrarse el próximo sábado en la ciudad de Barcelona, informó este lunes la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).
Con esta y otras acciones, la CBF quiere demostrar el respaldo institucional a sus jugadores de raza negra, especialmente a Vinicius Junior que ha enfrentado un constante acoso de grupos racistas de varios equipos cuando el jugador participa de los partidos. El último acontecimiento considerado de mucha gravedad fue una acción donde un grupo de jóvenes colgó un muñeco asemejando al jugador del Real Madrid y la selección de Brasil.
Esta acción fue duramente castigada por la justicia española que abrió proceso contra los responsables del hecho, mientras la CBF y el gobierno brasileño cerraron filas a favor del futbolista. Una acción simbólica ejecutada en solidaridad del atleta, por autoridades de Brasil, fue la de apagar la iluminación del Cristo del Corcovado, en Río de Janeiro, hace algunas semanas.
Vinicius Junior ha externado su preocupación por los ataques que ha enfrentado, pero aseguró que no será intimidado. «Agradezco mucho toda la cadena de cariño y apoyo que he recibido en los últimos meses. Tanto en Brasil como en el mundo. Sé exactamente quién es quién. Cuenta conmigo porque los buenos son la mayoría y no me rendiré. Tengo un propósito en la vida y si tengo que sufrir más y más para que las generaciones futuras no pasen por situaciones similares, estoy listo y preparado», publicó en su cuenta de Twitter.
En el partido del sábado, la selección brasileña utilizará el uniforme negro en el primer tiempo, mientras que en el segundo retornará al tradicional amarillo y azul.