La Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA) continuó con las verificaciones a las plantas y tanques para garantizar el servicio a la población en diferentes puntos del Gran San Salvador.
Uno de los sistemas que se inspeccionó fue la planta de bombeo Zacamil, en Mejicanos, desde donde se abastece del servicio de agua a 30 mil personas de los alrededores.
El presidente de la autónoma Rubén Alemán verificó el nivel cloro residual, el remanente después de que parte de la sustancia reaccione al proceso de desinfección, para garantizar que el líquido pueda ser apto de consumo.
También se verificó otras dos instalaciones como el tanque Dolores, siempre en Mejicanos, y la planta de bombeo Las Margaritas, donde el fin de semana se averió un motor, pero fue rearado el lunes.
“Un motor se los dañó el fin de semana y el lunes estaba completamente rehabilitado. Este es otro ejemplo de como el trabajo de ANDA estamos haciendo las cosas y llevando agua a los hogares salvadoreños”, agregó.