El sismo de 5.1 grados que se registró el pasado domingo en el Occidente del país ha cambiado el diario vivir de pobladores de zonas de San Lorenzo y Ahuachapán, quienes han sido evacuados mientras se realizan las inspecciones sobre los daños ocasionados por los movimientos telúricos que se han registrado.
“No nos han dejado solo, están con nosotros acá”, aseguró Jesús García, quien al borde de las lágrimas destacó la atención recibida para las familias que vivieron momentos de angustia y que necesitan de una mano amiga para aliviar sus necesidades.
Ileana de Linares, una de las afectadas que reside en el caserío Tahuapa, recordó el difícil momento que vivió tras el sismo, al mismo tiempo dice estar agradecida con la atención brindada por las autoridades.
“No nos esperábamos que llegaran a nuestros hogares y que nos dijeran que hay un albergue para nuestras familias”, aseguró Linares, quien consideró que los niños son los más afectados.
En total son 24 personas que han sido trasladadas hasta el albergue de la casa comunal La Roca, del cantón Las Chinamas, donde reciben alimentación y asistencia médica, en caso necesitarlo.