El ministro de Medio Ambiente, Fernando López, informó que el ingreso de la canícula al territorio salvadoreño está previsto para la segunda quincena del mes; sin embargo, el fenómeno no significa que deje de llover.
López explicó que la canícula no significa que deje de llover, sino que habrá una reducción de las tormentas en puntos específicos del país.
“Estamos en vigilancia por las tormentas y el paso de las ondas tropicales. La canícula no significa que deje de llover, sino que las cantidades de lluvias pueden disminuir en algunos puntos del país”, explicó.
El funcionario dijo que, por ejemplo, las lluvias del mes de julio se han concentrado en el centro y occidente del país. “En la segunda quincena de julio se verá con más fuerza el ingreso de la canícula”, apuntó.
Mientras llega la canícula, el país continuará afectado por el ingreso de ondas tropicales desde el océano Atlántico; es decir, se presentarán lluvias en la tarde y noche.